Música en la Plaza Nueva para la Soledad de octubre. Noelia márquez. Diario de Sevilla.
Un cortejo de más de 400 hermanos y un multitudinario público ávido ya del ambiente cofradiero celebró ayer el 450 aniversario de las primeras reglas fundacionales de esta cofradía. Una tarde casi primaveral trasladó a muchos sevillanos a la sensaciones que se viven cada Sábado Santo. Sólo faltaban los nazarenos.
Eran las ocho de la tarde y en el interior de la Catedral, hileras perfectas de hermanos, entre ellos varios hermanos mayores procedentes de distintas ciudades de Andalucía e incluso de Iberoamérica, contemplaban con expectación la imagen. Entre ellos se encontraba Rafael Andrade, hermano mayor de la cofradía de la Soledad en Lima (Perú) que llegó a Sevilla para participar en la celebración. El pasado sábado, la Soledad de Sevilla se hermanó con la cofradía peruana. Ambas hermandades disfrutan de un vínculo centenario. “En 1603 un grupo de sevillanos fundó en Lima la cofradía de la Soledad a su imagen y semejanza”, recordó Andrade. Desde entonces esta Virgen de Lima procesiona cada Viernes Santo con los mismos exornos. “Nuestra propia historia comienza en la Hermandad de Sevilla”, añadió el hermano mayor de Lima.