Provincia. El Convento y la Hacienda de Loreto en Espartinas, declarado Monumento
Arte Sacro. El Consejo de Gobierno ha aprobado la declaración como Bien de Interés Cultural, con la categoría de Monumento, del Convento y la Hacienda de Nuestra Señora de Loreto, en Espartinas (Sevilla). El conjunto delimitado, de 43.000 metros cuadrados de superficie, añade a su valor patrimonial un gran atractivo paisajístico por la escasa alteración del medio natural circundante. Asimismo, incluye la torre defensiva medieval ya protegida por la legislación estatal sobre castillos españoles.
Inicialmente ocupado por el asentamiento romano de Lauretum, el lugar mantiene durante la época islámica su carácter de explotación agrícola y tras la conquista cristiana pasa a manos de Mincer Manrique. En este momento arranca la primera fase constructiva de lo conservado actualmente, con el levantamiento de la torre defensiva mudéjar, las primeras estructuras relacionadas con los cultivos de la vid y el olivo y, por mecenazgo de los titulares de la hacienda, la primitiva ermita de la Virgen de Valverde.
Los orígenes del convento, al que quedó anexionado esta ermita, se remontan al año 1520, cuando los herederos donaron unos terrenos a los franciscanos para su fundación. Las dependencias de esta edificación se distribuyen en torno al claustro mudéjar que, construido en el siglo XVI y reformado en el XVIII, presenta planta cuadrangular y alzado de dos pisos.
La iglesia se construyó en la primera mitad del siglo XVIII bajo las trazas y la supervisión del arquitecto Diego Antonio Díaz. Con planta de cruz latina y una sola nave de cuatro tramos cubierta con bóveda de cañón con lunetos, este templo conserva un completo conjunto de retablos, esculturas, pinturas y artes suntuarias de temática franciscana y estilo tardobarroco.
Por su parte, la Hacienda, adosada al monasterio y con características típicas de la arquitectura rural sevillana, aúna el núcleo central destinado a vivienda, con zaguán y dos patios, y las estancias dedicadas a las labores agrícolas e industriales. Entre ellas destacan dos bodegas, compuestas por naves de planta rectangular y cubiertas por cerchas y tirantes de madera de tipología inglesa. En la intersección de ambas se levanta una torre mirador del siglo XVIII.
El decreto de declaración de Bien de Interés Cultural incluye también la escultura en madera de Nuestra Señora del Loreto (siglo XVIII) ubicada en el retablo mayor de la Iglesia, así como una zona de protección de 186.000 metros cuadrados en torno al monumento.