Entrevista a José Antonio Rodríguez Benítez: "la primera imagen que recuerdo de mi infancia es la de Santa Ana, patrona de Triana y Abuela de Dios". Juan Manuel Labrador Jiménez / Moisés Ruz Lorenzo
En una soleada tarde de julio, quedamos citados en la Plaza de San Lorenzo con José Antonio Rodríguez Benítez, que desde la pasada cuaresma ejerce las labores de redactor en el programa "Semana Santa de Sevilla" en Sevilla TV y en el Boletín de las Cofradías de Sevilla, y a la sombra del monumento a Juan de Mesa, creador del Señor de Sevilla, mantuvimos una amena conversación.
Pregunta: ¿Cómo se define José Antonio Rodríguez a sí mismo en este mundo cofrade?
Respuesta: José Antonio Rodríguez es un joven de 21 años, a punto de cumplir los 22, que se bautizó en San Julián frente a la Virgen del Rosario, y que durante los primeros nueve meses de su vida vivió en la Macarena, hasta que se trasladó su familia a Gines, donde seguimos viviendo aún. Por lo que respecta a mi perfil cofrade, soy hermano de la Esperanza de Triana, donde me confieso un gran devoto del Cristo de las Tres Caídas, y del Dulce Nombre.
P: ¿Cómo participas en tus hermandades?
R: En el Dulce Nombre participo colaborando en la priostía, ya que en ella es como consigues estar más cerca de los titulares, que son lo más importante de una hermandad, y recientemente me han nombrado director de su boletín; mientras que en la Esperanza de Triana soy redactor también de su boletín, y luego, en ambas, he salido de acólito tanto en los cultos como en la estación de penitencia.
P: ¿Qué significan para ti los titulares de estas Hermandades?
R: Ante todo, quiero decir que las imágenes han de ser un vehículo para llegar a Dios y a María, por lo que hemos de evitar confundir los términos, y sin confundirlos, te puedo decir que el Cristo de las Tres Caídas me cautivó en la calle la primera vez que lo vi, que fue en el Santo Entierro Grande de 1992, y decidí hacerme hermano, y ya luego la Esperanza me fue llegando al alma, pues no olvidemos que es una de las expresiones más importantes de Triana en lo que a la devoción mariana se refiere, y en el Dulce Nombre me tira mucho también, como se dice en nuestro hablar cofrade, Jesús ante Anás, aunque la Virgen me encanta y le tengo mucha devoción.
P: En una, la Esperanza de Triana, eres redactor del boletín, y en otra, el Dulce Nombre, te acaban de nombrar director de la misma publicación, y a ello se suma tu desmesurada juventud… ¿Cómo has recibido este encargo?
R: Al principio me dio un poco de miedo dada la responsabilidad de este puesto, ya que es el medio con el que te comunicas con los hermanos, y tener a los hermanos informados es importante y hay que tenerlo muy en cuenta, aunque en el Dulce Nombre sólo se hace un boletín al año y lo demás son hojas informativas, pero se está planteando con esta nueva junta de gobierno hacer ahora dos al año.
P: Pero también eres, desde la pasada cuaresma, redactor del Boletín de las Cofradías, y junto a Armando Mesa, sois los dos más jóvenes redactores que habéis pasado por esta publicación…
R: Es cierto, aunque he de decir que nuestra llegada al boletín se debe gracias a Esteban Romera, ya que se produjeron una serie de bajas en la redacción, entre ellas la de Amparo Rodríguez Babío por la maternidad, y al quedar vacantes estos puestos, el director, Jiménez Sampedro, confió en la palabra de Esteban, y entramos depositándonos toda su confianza, y desde luego la experiencia está siendo muy agradable, y me alegro de haber entrado en el equipo de esta publicación prestigiosa y antigua.
P: Director del Boletín del Dulce Nombre, redactor en el de la Esperanza de Triana y en el de las Cofradías, y este año has sido también redactor en el programa "Semana Santa de Sevilla" en Sevilla TV, y además acabas de finalizar ya la carrera… ¿Se te ha venido todo un poco encima, o lo consideras una carga fácil de llevar?
R: El segundo trimestre de este año es lo que peor he llevado, ya que he tenido que compaginar el final de la carrera y los exámenes con el programa y con el Boletín de las Cofradías, hasta el punto de que muchos martes, cuando terminaba el programa, llegaba a mi casa y estudiaba un poco más, porque de lo contrario me quedaría sin tiempo para el estudio, llegando a dormir cinco o seis horas, aunque no me quejo, porque todo ello son responsabilidades y las tienes que llevar siempre hasta el final lo mejor que puedas. Con organización, se puede conseguir lo que uno se propoga, y en mi caso merecía la pena, ya que por fin termino una etapa, la de estudiante, para empezar otra, la de periodista.
P: ¿Y qué otras labores periodísticas has hecho también vinculadas al mundo de las cofradías al margen de las ya citadas?
R: Pues en Sevilla Televisión como ya hemos estado hablando, y también en una emisora de radio local en Guillena, donde presentaba un programa cofrade titulado "La revirá", y en él contaba con la colaboración de varios amigos, por lo que fue un tiempo en el que también disfrute mucho con la labor que hacía.
P: Hay también otra faceta tuya, quizás desconocida para muchos, y es la de haber pronunciado algunos pregones…
R: Y bien lo dices, es quizás un poco desconocida, pero claro, yo tampoco he pronunciado muchos pregones. El primero fue hace cuatro años en el colegio donde yo estudié, el Marcelo Spínola de Umbrete, luego en 2002 pronuncié el de la juventud cofrade de Triana, y aquel año me tocó pronunciarlo en la capilla de la Estrella, ya que es un pregón rotativo en lo que a la sede se refiere, y finalmente en 2003 el de la juventud de mi hermandad de la Esperanza de Triana.
P: El último, como bien has dicho, fue el de la Esperanza de Triana hace dos años, pero ¿si te vuelven a llamar, volverías a subir a un atril a desgranar tus sentimientos?
R: Sinceramente no lo sé. Es algo que no te lo planteas hasta que no te proponen otro, y es lo mejor que uno debe hacer, ya que no se debe pensar en dar un pregón hasta que no te lo propongan. A lo mejor, si me vuelven a llamar, volveré de nuevo a un atril, pero aún así no lo sé, porque también puedo encontrarme en un momento en el que no pueda dedicarle tiempo a escribir un pregón si me lo encargaran. Pero si por mí fuera, no me importaría volver a pregonar.
P: Un punto importante en tu persona es que eres un joven católico practicante que, además, ejerce las labores de catequista en la Parroquia de Santa Ana. ¿Qué nos puedes comentar de esta tarea?
R: Se trata de una labor maravillosa y espiritualmente gratificante. Permíteme que aproveche esta oportunidad para que le agradezca a don Manuel de Azcárate, párroco de Santa Ana, que quisiera contar conmigo para esta tarea, ya que, además, yo llego ahí para cubrir el puesto que había dejado vacante Antonio Rodríguez Babío cuando éste ingresa en el seminario hace tres años. Por otra parte, te digo que es muy especial para un joven el tener un grupo de chavales al que preparar para recibir el sacramento de la confirmación, y esta actividad sea, quizás, una de las más importantes que esté haciendo ahora como una persona comprometida con aquello en lo que cree, como es nuestra iglesia católica. Por último, para mí es muy emotivo ser catequista en esta parroquia, porque desde pequeño, mi abuela me llevaba a ella, y la primera imagen que recuerdo de mi infancia no es precisamente de ninguna hermandad, sino que es la imagen de Santa Ana, patrona de Triana y Abuela de Dios.
P: Con anterioridad hemos hablado de tu participación este año en Sevilla TV en su programa cofrade, donde se te han encomendado numerosos reportajes, por lo que has podido acercarte a muchas historias y a muchos aspectos que, quizás, te permitan valorar cuál es la realidad actual de nuestras hermandades.
R: Sin duda. Pero lo que tengo claro, a pesar de todo, es que la realidad de nuestras hermandades ha de cambiar, y mucho, en lo que alude a su vida interna, porque es muy triste ver como muchas corporaciones están divididas por culpa de un cabildo de elecciones y ver que hay rencillas entre los hermanos. Lo que hay que hacer es buscar la unidad para buscar la misma verdad, que es la que Cristo nos quiere mostrar, y muchas veces nos olvidamos de eso, ya que éste es el punto principal que debe tener presente cualquier cofrade, ya que de lo contrario, no estaremos cumpliendo con la tarea que Dios nos encomienda como hijos suyos que somos.
P: ¿Seguirás ejerciendo como un periodista cofrade en aquellos momentos en los que debas serlo?
R: Me gustaría, está claro. Porque si eres periodista y también sevillano, y como tal cofrade, pues quieres intentar seguir sirviendo también a las hermandades desde las ciencias de la información, y de hecho, los medios de comunicación se han convertido en un elemento clave para la difusión del mundo de nuestras hermandades.
P: A pesar de tu juventud, habrás tenido ya una serie de vivencias y habrás conocido a personas que habrán calado hondo en tu alma. ¿Nos podrías hablar un poco de ello?
R: En lo referido a personas, no puedo quedarme sin hablar de Víctor García Rayo, que ha sido quien me ha abierto las puertas en este mundo de las cofradías vista desde los medios de comunicación, ya que en este tiempo que estado con él, me ha enseñado muchas cosas importantes como profesional y como cofrade, aunque tampoco quiero olvidarme de otra persona especial para mí como es Antonio Cattoni. Luego, en cuento a las vivencias, tengo tres muy especiales, dos de ellas en cada una de mis hermandades. La primera, aquella vez en la que se cerraron las puertas de San Lorenzo para montar el altar de cultos del Dulce Nombre y me quedé dentro por vez primera, siendo ahí cuando comienza mi contacto con la priostía de esta corporación, y la segunda en la Esperanza de Triana cuando pronuncié el pregón, ya que para mí aquella experiencia fue un dulce sueño del que no hubieras querido despertar nunca. Y como ya he señalado, hay una tercera, que fue cuando vi por primera vez al Nazareno del Silencio en la calle, siendo una imagen que, por sí misma y por el contexto en el que se enmarca en la madrugá del Viernes Santo, me sorprendió, hasta el punto de que esta imagen del Señor supone para mí una devoción escondida en mi alma y que no muchos conocen.
P: Finalmente, te dejamos abierta la entrevista para que la finalices manifestando lo que quieras decir y que, quizás, no te hayamos preguntado.
R: Quisiera agradecer a Arte Sacro que haya querido entrevistarme, cuando yo soy todavía, y lo seguiré siendo, un sevillano más que está en la bulla para ver nuestras cofradías. La televisión es verdad que me ha hecho más conocido, pero sin que yo haya hecho ninguna proeza ni nada importante, sino sólo mi trabajo. Por último, dejadme desvelar otras devociones especiales que tengo, como son la Pastora de Triana, de echo, mi hermano es costalero de Ella, y la Virgen del Amparo, aunque otra hermandad a la que le tengo un cariño especial es a la de Montserrat. Y nada más.
Fotos: Juan Manuel Labrador©