Besamanos a la Virgen de Araceli

Arte Sacro. En la jornada del 12 de octubre se celebró el besamanos de Ntra. Sra. de Araceli en la Parroquia de San Andrés. La imagen fue colocada ante el presbiterio de la parroquia, que fue exornado con diferentes juegos de blandones y secundillos pertenecientes a la fábrica parroquial.

Entre los blandones aparecían jarras de la Hermandad Sacramental con bouquets de liliums blancos y columnas florales, iluminando el conjunto varios candelabros de cinco brazos, pertenecientes a la Hermandad Sacramental de San José Obrero. En primer plano destacaba la imagen de la Virgen asentada sobre la nueva peana realizada por el taller de carpintería religiosa de Andrés Martín, con frente dorado con decoración de espejos y molduras. 

La imagen lucía su saya bordada sobre tisú de oro, de autor anónimo restaurada en el año 2009 por el taller de Mariano Martín Santonja, y un manto de terciopelo burdeos bordado en oro por el taller de Carrasquilla, cedido por la Archicofradía de la Coronación de Espinas, de la feligresía de San Andrés.

Los atributos de orfebrería completaban el adorno de joyería que presentaba la imagen, en el cual destacaban un aderezo de plata y nácar con motivos vegetales, donado por el equipo de camareras, y diversas piezas cedidas por una familia de la Hermandad, que ha tenido a bien donar una cruz pectoral que reproduce en la plata el Crucificado de San Damián, tan vinculado con la Orden Seráfica.

Otros obsequios que ha recibido la imagen con motivo de este besamanos son un corazón votivo del siglo XVII en plata de ley, en pequeño tamaño para la imagen del Niño Jesús y un tocado de encaje de tambor del siglo XIX, donado por el proveedor de antigüedades textiles de la corporación.

El montaje del besamanos no se ceñía al presbiterio, sino que se extendía por el resto de la nave central de la iglesia, habiendo sido colocados en los pilares de la iglesia desde la puerta de los pies dos columnas con adornos florales y dos parejas de candelabros de bronce dorados, una de ellas cedida por la Hermandad de la Divina Pastora y Santa Marina y otra propiedad de la propia corporación de Araceli, adquirida para este culto. La Hermandad ha iniciado en este besamanos la venta de recuerdos como rosarios y medallas pequeñas con gran éxito.

Dentro de la jornada del besamanos se vivió el bautizo de un familiar de un miembro de la Junta de Gobierno celebrado por Francisco Moreno Aldea y se culminó con una Misa Solemne en la festividad de Nuestra Señora del Pilar presidida por su párroco, Manuel Campillo Roldán, con importante afluencia de hermanos.

En el apartado protocolario destacaron las ofrendas florales de las Hermandades vecinas de Santa Marta y de la Sagrada Lanzada, así como la del grupo de hermanas y amigas de la calle Sinaí, que se sumó a otras que realizaron diferentes hermanos. El balance del besamanos es exitoso tanto en calidad del montaje como en asistencia de fieles, agradeciendo especialmente a los medios de comunicación su cobertura informativa, a los hermanos y amigos que lo visitaron su interés y a todos aquellos que colaboraron en el montaje, destacando la ayuda prestada por la juventud de la Hermandad de San José Obrero.  

Fotos: Juan Alberto García Acevedo.