Intramuros. Nada Nuevo bajo las nubes. Juan Miguel Vega. El Mundo
La sequía hace bajar la marea del canal de Torreblanca provocando la emergencia de coches que fueron arrojados a él. Coches robados, claro, en paradero oficialmente desconocido aunque probablemente intuido por los vecinos del barrio. Sus corroídas carrocerías se ofrecen ahora a la vista en posturas inverosímiles como islotes de chapa que hizo surgir en un río artificial el sedimento de la inseguridad ciudadana, el limo de la delincuencia.
Un tipo de 43 años acaba de celebrar su detención número 66 y su inmediato y enésimo ingreso en prisión tras asaltar a una turista italiana en el Paseo de Colón. O sea, que seguimos en las mismas.
En el Ayuntamiento, el concejal de Patrimonio, Antonio Rodríguez Galindo, hombre contumaz, insiste en 'terminar' el labrado plateresco de la fachada de la plaza de San Francisco. A este paso no seria de extrañar que acabara consiguiéndolo. Cosas peores se han visto y no ha pasado nada, nadie ha dicho ni mú. Aquí a la gente no le gusta meterse en líos. Un ejemplo que ahora se recuerda constantemente es el óbito de la compañía Sevillana, abducida por esa Endesa que ahora quieren abducir los catalanes de La Caixa a través de Gas Natural. Sea una operación política, como dice la oposición; sea empresarial, como sostiene el gobierno, lo cierto es que si fragua tendrá como resultado que la nueva empresa pagará sus impuestos en Cataluña y no en Madrid. Pague en un sitio u otro, el principal mercado de Endesa está en Andalucía, donde otrora pagaba sus impuestos la extinta compañía Sevillana y ahora nadie paga nada. Y nadie dice nada.
Vuelve la botellona a la plaza del Cristo de Burgos. De momento, de forma incipiente pero inquietante. La Junta ha puesto en manos del Ayuntamiento la lucha contra tan molesta práctica, pero el consistorio dice no tener medios. Exactamente lo mismo que les ocurre a los jóvenes de la generación mejor preparada de la Historia de España. No tienen medios, por eso se emborrachan a base de garrafa. Seguimos igual.
Los Dalton de la marisma
Este periódico viene contando de forma detallada en los últimos días las tropelías de esa pandilla de forajidos rurales que atiende por «la banda del Pimiento», cuyas andanzas —robos en naves, asaltos a domicilios, sabotajes de motores de avionetas de fumigación...— se centran básicamente en la localidad de Isla Mayor, entre cuyo vecindario empieza a surgir ese peligroso instinto que mueve a tomarse la justicia por propia mano ante la impotencia que le causa la impunidad con la que actúa. 'El Pimiento' y sus secuaces son conocidos y están localizados, pero en el juzgado se benefician de aquello tan famoso de entrar por una puerta y salir por la otra. Quizá tendrán que hacerlo sesenta y seis veces, como el del Paseo de Colón, para acabar en la cárcel. Estos Dalton marismeños son el más destacado exponente de la espiral de inseguridad que afecta al segundo anillo de la corona metropolitana de Sevilla, hasta donde la capital ha logrado exportar también el fenómeno de la violencia 'cani'.
Las ferias de los pueblos, otrora motivo de festivas peregrinaciones, constituyen ahora un pretexto para el traslado en masa de grupos de niñatos que buscan jaleo. En principio lo buscan entre ellos, pero si no se encuentran, la emprenden con el primero que se les cruza. Su calendario es ahora herramienta fundamental de trabajo para la Guardia Civil.
Oficinas para jóvenes empresarios Un total de 154 afiliados a la Asociación de Jóvenes Empresarios de Sevilla podrán adquirir un módulo en la cuarta torre que la promotora Vilamar -del grupo Banco Pastor— ha reservado en el complejo Torneo Parque Empresarial. Los interesados sólo tendrán que abonar un 10% del precio del módulo de oficina y pueden financiar el 90% restante con un tipo de interés más ventajoso.
Amenaza Cofrade
El responsable de una página web de enorme seguimiento dedicada a informar sobre las cofradías sevillanas ha empezado a comprobar las contrapartidas negativas que, como todo en la vida, también tiene el enorme éxito de su iniciativa. Y es que el eco que encuentra todo lo que se publica en dicha página es de tal calibre que nada pasa desapercibido, especialmente entre las propias hermandades. Desde una de ellas se le ha hecho llegar la amenaza de que puede ser objeto de posibles acciones judiciales a acusa de un articulo de opinión publicado por un colaborador de la revista digital que dirige cuya identidad se oculta bajo un pseudónimo. Varios abogados se han ofrecido ya para asesorar al responsable de la página en caso de que las amenazas sigan adelante. El artículo, por cierto, ha sido retirado de la página.