Ritos tradicionales con la procesión de la Virgen Milagrosa

Francisco Santiago. Son ya más de 30 años los que lleva la Virgen Milagrosa recorriendo el entorno de la Casa Provincial de las Hijas de la Caridad, un camino lleno de abrojos y cardos que han tenido de ir segándose.

Todo debería de ser fácil, pero no lo es porque cualquier proyecto llevado por grupos tiene que tener una cohesión que, como pasa en las hermandades, no siempre llega a cuajar.

Si a esto le sumamos la propia “Iglesia”, sólo queda un grupo de devotos que, lejos de tirar la toalla y rendirse, se hacen fuertes y consiguen lo que parece imposible, que treinta años después la Milagrosa siga iluminando las calles de varias feligresías, a pesar de las propias “hermanas”, a pesar de los párrocos (Hola Don Ignacio, adiós Don Emilio) y a pesar de haber logrado que los brotes sigan germinando en este desierto que a veces se conforma en la propia Iglesia.

Por eso felicidades a Juan José Pérez Bustelo y su equipo de hermanos o socios (como quieran ustedes llamarlo), porque la FE, en mayúsculas, a veces no entiende de parroquias, ni de sacerdotes, ni de prioras… sólo de devociones ancestrales que van más allá de la propia religión.

Fotos: Francisco Santiago.