Sevilla salda su deuda con el Padre Trenas

Arte Sacro. El alcalde de la ciudad, Juan Ignacio Zoido ha inaugurado la rotulación de una calle en honor al padre Manuel Trenas, con el que Sevilla tenía una deuda. El Padre Trenas, Jesuita, malagueño y sevillano de corazón, fundó la Ciudad de los Muchachos, que fue también conocido como el hogar del Niño Jesús. Con sus miles de “hijos”, niños abandonados a su suerte que tuvieron “mucha suerte” consiguieron convertirse en hombres de bien, gracias al amor incondicional, al apoyo y a la fe del Padre Trenas. Porque sobre todas las cosas, el Padre Trenas tenía fé en el ser humano. El Padre Trenas nació el 26 de julio de 1914 en el seno de una familia católica que le inculcó el amor a los santos fundadores de la Compañía de Jesús, su modelo de fe, según decía.

Quería seguir los pasos de San Francisco Javier y San Ignacio de Loyola poniendo en práctica la virtud de la caridad y el amor. Y lo hizo ayudando a las personas más necesitadas de La Vega de Triana y de El Vacie y rescatando a sus niños de la dramática situación de miseria en la que se encontraban.

El Ayuntamiento aprobó dedicar esta calle a petición de su Hermandad de los Javieres. Una calle, que linda con Bami y las Tres Mil el sitio que él querría. Porque aquí, aún late su corazón gracias a los recuerdos de quienes fueron sus hijos adoptivos.

Según ha comentado Zoido "el Padre Trenas merece este reconocimiento público porque Sevilla tenía una deuda moral con él.  Por su importante labor con la que consiguió cambiar la vida de muchos niños".

Desde que nacen, los niños requieren amor, atención, dedicación…hay quien dice que si el arbolito se tuerce…ya saben…pues yo, no estoy de acuerdo. Porque nunca es tarde, porque ningún niño está perdido, como tampoco lo está ninguna ciudad. Porque los árboles se enderezan, los barrios de una ciudad tratada con amor mejoran y el niño más desencaminado puede volver a su camino si alguien lo coge de la mano.

Esos niños, al los que el Padre Trenas cogió de la mano hoy, son hombres de bien. Y es que cómo él mismo decía “Los niños de hoy, son los hombres de mañana, si los abandonamos no tendremos derecho a quejarnos de que la sociedad sea mala”.

Al acto acudió la familia del padre Trenas, la Hermana Mayor de la Hermandad de los Javieres, Maruja Vilches y el Delegado Diocesano de HH y CC, Marcelino Manzano Vilches.

Fotos: Arte Sacro.