Provincia. Una mirada a la provincia. La hermandad del Gran Poder de Huévar del Aljarafe

Eduardo Fdez. López. La Hermandad Sacramental de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder y Nuestra Señora de la Asunción de Huévar del Aljarafe se funda en 1890 con el fin primordial de celebrar la procesión del Corpus Christi, el Jueves Santo y la procesión de impedidos.

En un principio esta hermandad realizaba su estación de penitencia el Miércoles Santo con la única imagen por aquel entonces de la hermandad, Jesús Nazareno.

No sería hasta el año 1944 cuando se incluye en el titulo de la hermandad a Nuestra Señora de la Asunción, patrona de esta localidad aljarafeña.

En 1954 se modificó nuevamente el titulo al cambiarle la advocación a Jesús Nazareno, pasando a llamarse Nuestro Padre Jesús del Gran Poder.

Cada Martes Santo la imagen del Gran Poder recorre las calles de la localidad desde la iglesia parroquial de la Asunción en un paso de estilo barroco realizado por Alfonso Ramírez Martínez en madera de cedro, teniendo la peculiaridad de ser el primer paso portado por costaleros en la localidad.

Participan en la procesión unos 120 hermanos nazarenos cuyo hábito nazareno está compuesto por túnica negra de cola y antifaz del mismo color. 

La imagen de Jesús del Gran Poder es una obra anónima del siglo XVIII, restaurado en 1931 desconociéndose en que consistió esta actuación y en 1988 por Luis Álvarez Duarte, realizando dicho escultor el actual cuerpo del Señor.

La Virgen de la Asunción es una obra anónima del XVIII y realiza cada 15 de agosto, con motivo de su popular festividad, su salida procesional por las calles del municipio.

La procesión se inicia desde el templo parroquial a las 21 horas, recorriendo las principales calles del pueblo y presentándose ante el ayuntamiento y las casas de hermandad del resto de hermandades como la Vera Cruz y la Soledad.

Esta imagen procesiona en un paso que es llevado por fuera por 16 costaleros. Destacar del exorno floral la gran cantidad de nardos que rodea a la imagen, desprendiendo por todo el recorrido un agradable olor.

Fotos: Eduardo Fdez. López y Manuel Pinto Montero