Bizcochos marroquiés en la Parroquia de San Roque
Arte Sacro. Como viene siendo ya tradicional, la parroquia de San Roque colabora, un año más, en la distribución de los bizcochos marroquíes elaborados artesanalmente por las madres concepcionistas de Osuna. Los beneficios obtenidos de su venta irán destinados íntegramente para el sostenimiento económico de la comunidad religiosa y el mantenimiento del convento de la Purísima Concepción de Osuna.

Pese a su denominación, estos dulces no proceden de Marruecos. Su origen se remonta al siglo XVI, cuando el arzobispo de Sevilla, don Rodrigo de Castro, autorizó a las hermanas Luisa, Catalina y Francisca, hijas de Cristóbal Marroquí, a fundar un convento en un palacio de Écija. Sin embargo, habría que esperar hasta el siglo XVIII para encontrar el nacimiento del dulce tal como lo conocemos hoy, cuya creación se atribuye a Mónica Garnica y Córdoba, conocida en el convento como sor Mónica de Jesús, marquesa de Valdetorres, en el que ingresó en 1752.
Cabe destacar que, en octubre de 2014, debido a la ausencia de nuevas vocaciones y al envejecimiento de la comunidad, el Convento de la Santísima Trinidad y Purísima Concepción (Écija) cerró sus puertas. Como consecuencia, sor Pilar de San Antonio, de 90 años y ya enferma, fue trasladada al convento hermano de Osuna, llevándose consigo la receta original, que allí se conserva actualmente. Sor Pilar falleció en 2017, pero el legado de las Marroquíes sigue vivo gracias a su labor y dedicación.
