Provincia. Una mirada a la provincia: La hermandad Sacramental de Umbrete
Eduardo Fdez. López. Hermandad Sacramental y Animas Benditas, Nuestro Padre Jesús de la Vera Cruz, Santo Entierro de Cristo y María Santísima de los Dolores.
De fundación desconocida, existen referencias documentales que avalan su existencia ya en el siglo XVII, aunque la actual hermandad es fruto de su reorganización tras la Guerra Civil.
Realiza su primera Estación de Penitencia en la noche del Jueves Santo del templo parroquial de Nuestra Señora de Consolación, templo dieciochesco mandado a construir por el arzobispo Salcedo y Azcona.
En el primer paso, con canasto de caobilla en su color iluminado por cuatro faroles, procesiona Nuestro Padre Jesús de la Vera Cruz, crucificado anónimo de cierta antigüedad.
En el segundo de los pasos la imagen de la Virgen de los Dolores, imagen de candelero de autor desconocido de mediados del siglo XIX.
Esta bella dolorosa cuya mirada dirige al cielo procesiona bajo palio de terciopelo negro bordado en oro donado por Manuel Sánchez Martínez. El manto, bordado asimismo en oro y del mismo color, es obra de Benjamín Pérez.
La orfebrería de este paso corresponde en su totalidad a Juan Borrero.
La hermandad vuelve nuevamente a salir a las calles de esta localidad del Aljarafe realizando Estación de Penitencia en la tarde del Sábado Santo, en esta ocasión en el paso en el que había procesionado dos días entes el crucificado, procesiona la imagen del Cristo Yacente, seguido nuevamente por el paso de palio con la Santísima Virgen de los Dolores.
Esta imagen de Cristo Yacente es obra de Jose Antonio Navarro Artega realizado en 1994 para sustituir a un Yacente antiguo de escayola que poseia la hermandad, al principio esta nueva imagen no agradó a sus hermanos por el pequeño tamaño del sudario y su dramatismo, por lo que el escultor tuvo que retallarlo agrandandole el paño de pureza y suavizandole algunos rasgos.
Ambos pasos son portados por 36 costaleros, siendo su salida y entrada de gran dificultad debido a las dimensiones de la puerta y a la rampa del porche que hay que salvar, siendo también momentos emocionantes su paso por lugares en los que los costaleros haciendo alarde de maestría, han de echarse a tierra con los zancos rozando el suelo, debido a la escasa altura de los cables de alumbrado público.
Por ultimo comentar que los nazarenos visten túnica negra y antifaz, botonadura, capa y cíngulo morado.
Fotos: Eduardo Fdez. López