Hispális ya tiene novio
Francisco Santiago. Ser turísta en Sevilla es una maravilla, porque tienes el privilegio (y la cara dura) de poder hacer lo que te venga en gana porque Sevilla “is different”.
Y ahí estaba el caballero vestido de explorador africano subido en la fuente dedicada a la Diosa Hispalis, mientras que la estatua parecía mirarle asombrada sin saber qué hacer: si titarle los tejos o tirarlo al agua…
Lo segundo hubiera sido buena opción, aunque, pensando en los "kanis" que rondan por la urbe…
Fotos: Francisco Santiago.