“AMOR Y VIDA”. Luz por los donantes de órganos en Pino Montano
Arte Sacro. En la tarde del lunes 24 de marzo, en la parroquia de San Isidro Labrador del populoso barrio de Pino Montano de Sevilla, fue presentado el cirio dedicado a los donantes de órganos que iluminará a María Santísima del Amor en su salida procesional del Viernes de Dolores.
Presentó el acto el Teniente de Hermano Mayor Manuel Bustillo Ramírez quien, como persona trasplantada de hígado, manifestó que el mensaje “Amor y Vida” que lleva este cirio iba a fomentar el amor al prójimo, para que aumenten las donaciones de órganos y llevar Esperanza a enfermos que esperan el trasplante de un órgano o de médula para seguir viviendo.
El Dr. Pérez Bernal dió las gracias a la hermandad por tantos años de compromiso con los enfermos y fue presentando a las personas trasplantadas y donantes de órganos presentes.
Paqui, trasplantada de corazón, Ana de los pulmones y José Antonio y Conchi trasplantados de hígado, manifestaron la importancia de estos actos para rendir homenaje a los donantes de los órganos que les regalaron una segunda oportunidad en la vida y para iluminar los corazones para hacernos más solidarios.
Antonio y Francisco, trasplantados de riñón, agradecieron a sus donantes vivas Conchi y Ángeles el gran regalo que les hicieron.
Javier, trasplantado dos veces de hígado, habló de las donaciones de órganos como un acto de generosidad cristiana. Antonio, que espera recibir un trasplante hepático, emocionó a los presentes por su valentía y Esperanza a la hora de enfrentarse a la enfermedad y a todo el proceso. Recordó que Cristo fue el primer donante. Agradeció a todos los presentes el ánimo que le transmitieron y la ejemplar lucha que ejercen por la vida de los enfermos que están pasando por lo que ellos ya superaron.
El párroco, Javier Martínez Naranjo, refiriéndose a las donaciones de órganos, sangre y médula, habló de valores cristianos como el amor al prójimo, generosidad, entrega y humanidad, recordando que la muerte no es el final y que la Resurrección es una realidad.
Fotos: José Pérez Bernal