Provincia. La Hermandad del Rocío de Umbrete presentó su antiguo Simpecado junto al cajón de madera tras la restauración
Manuel Pinto Montero. Como si de un día de la salida de Pentecostés se tratase el pueblo de Umbrete se arremolinaba alrededor del Templo de Consolación para contemplar una estampa de décadas pasadas y que muy pocos ya recuerdan en la localidad. Con motivo de la Restauración del primitivo simpecado de la Hermandad y la restauración también de la carreta, el famoso cajón de Umbrete, la Hermandad ha querido presentarlo al pueblo peregrinando por las principales calles de la localidad hasta su Casa Hermandad donde será custodiado el Simpecado.
Con el sol en todo lo alto se celebraba en el Templo Parroquial de Nuestra Señora de Consolación la solemne Eucaristía presidida por los dos simpecados que posee la Hermandad. Tras la Misa se iniciaba el cortejo compuesto por numerosos hermanos y Hermandades invitadas que han querido arropar a ésta ya bicentenaria Hermandad. Antes de abandonar el Templo ambos Simpecados fueron trasladados hasta el Retablo donde quedó depositado el Simpecado Actual, que data del año 1947.
El antiguo Simpecado abandonó el Templo entre la emoción de sus vecinos y el repique de campanas, cohetes en el cielo como cada primavera. Tras el rezo del ángelus se entronizó en la carreta de madera para iniciar su peregrinación pos las calles umbreteñas. La carreta, el viejo cajón de madera, ha sido restaurada por David Martínez y estaba exornado con diversas flores a los pies del Simpecado y con espigas en las jarras de plata. Esta carreta fue realizada por Agustín Borrego en 1910 y es la más antigua de las que peregrinan al Rocío cada Pentecostés.
El Simpecado ha sido restaurado por el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, presente también en esta salida extraordinaria. Según los historiadores puede ser datado en el siglo XVIII, por tanto se podría considerar el tercer simpecado más antiguo de las Hermandades filiales. Este simpecado ha estado durante 70 años en domicilios particulares hasta que fue entregado a la Hermandad en el año 2023.
Durante su recorrido fue emotivo su paso por la Plaza de la Virgen del Rocío donde se rezó cantando por sevillanas. Metros después se rezó ante la Capilla de San Bartolomé y la Virgen del Consuelo para continuar buscando el monumento a la Inmaculada o la Casa Hermandad Sacramental o el Convento de las Hermanas de la Cruz antes de atravesar el Arco de la Plaza del Arzobispo y buscar su Casa Hermandad.
Numerosos vecinos y devotos rocieros la acompañaron en este peregrinar con los trasladó al camino marismeño. Magistral el trabajo de los boyeros que supieron caminar por las calles de Umbrete llevando un trocito de historia y de fe rociera de uno de los rincones más rocieros del aljarafe.
Fotos: Manuel Pinto Montero.