El Cristo de los Desamparados del Santo Ángel: Una Procesión que Enamora Sevilla
Fco Javier Montiel. En la tarde del Sábado de Pasión, Sevilla volvió a rendirse ante la majestuosidad del Cristo de los Desamparados del Santo Ángel, que realizó su segunda salida procesional desde el convento carmelita. La imagen, obra del maestro Juan Martínez Montañés, recorrió las calles del centro histórico, dejando a su paso un rastro de devoción y arte que cautivó a sevillanos y visitantes.
Bajo la dirección de los Hermanos Villanueva, el paso avanzó con elegancia y precisión, marcando el compás de una procesión que ya se ha consolidado como una cita imprescindible en la víspera de la Semana Santa. La cuadrilla de costaleros, con su esfuerzo y dedicación, logró arrancar aplausos en cada chicotá, especialmente en los momentos más emblemáticos del recorrido, como su paso por la calle Rioja y la entrada en la Plaza del Salvador.
La Banda de Música de La Puebla del Río acompañó al Cristo con un repertorio cuidadosamente seleccionado, en el que destacaron marchas clásicas y otras composiciones más recientes que resonaron con fuerza en el corazón de los asistentes. La música, en perfecta sintonía con el andar del paso, añadió un toque de solemnidad y emoción a la procesión.
El exorno floral del paso fue otro de los grandes protagonistas de la jornada. Una cuidada selección de lirios morados y rosas rojas adornaron el paso, realzando la belleza de la talla y creando un contraste visual que no dejó indiferente a nadie.
Entre los estrenos más destacados de esta procesión, se encontraba un incensario y una naveta de Bernet; relicarios de plata en las esquinas del paso, obra de José Manuel Conradi.
La procesión del Cristo de los Desamparados del Santo Ángel no solo es un acto de fe, sino también una manifestación cultural y artística que enriquece el patrimonio de Sevilla. Este Sábado de Pasión, la ciudad volvió a demostrar que su Semana Santa es mucho más que una tradición: es un sentimiento que se vive y se comparte.
Fotos: Fco Javier Montiel