Arte Sacro
  • Noticias de Sevilla en Tiempo de Pascua
  • viernes, 2 de mayo de 2025
  • faltan 331 días para el Domingo de Ramos

La Escolanía Virgen de los Reyes, memoria emocional de Sevilla. Andrés González-Barba. ABC


Durante 35 años la Escolanía Virgen de los Reyes se convirtió en un emblema de la ciudad. Sus integrantes fueron niños que cantaron en los principales actos religiosos de la ciudad, como la proclamación de la Virgen de los Reyes como patrona de Sevilla y su Archidiócesis en 1946, o su participación en la coronación canónica de la Macarena en 1964. Ahora el libro «La Escolanía de Nuestra Señora de los Reyes» (Fiestas Mayores), del investigador y escritor Pedro José Sánchez Gómez, recuerda los momentos más importantes de esta agrupación coral que estuvo íntimamente unida a la figura de su director, Ángel Urcelay.

La historia de esta agrupación tiene su precedente en el año 1941, cuando el cardenal Segura creó la «Asociación de fieles de la devoción de Nuestra Señora de los Reyes». Sería en otoño de 1944 cuando el propio cardenal Segura impulsara la formación de la Escolanía. El encargo de la formación recayó en Ángel Urcelay, organista primero de la Catedral de Sevilla. Desde esa época y hasta junio del año 1979 se inició una etapa muy fecunda para este coro que participó en la práctica totalidad de los actos religiosos que se celebraron en Sevilla en aquellos años. En su primera época, la Escolanía estuvo integrada principalmente por niños de familias con poca capacidad económica, «de ahí que debamos resaltar la labor social que llegó a desempeñar esta Escolanía durante esos años en una época en que la ciudad vivía la dura posguerra», señala Sánchez Gómez.

La Escolanía participó en actos muy relevantes como la imposición de la medalla de la ciudad a la Virgen de los Reyes (1958), o las coronaciones canónicas de Virgen de la Amargura (1954) y la Esperanza Macarena (1964). Un año después, en 1965, la Escolanía fue la primera coral sevillana que grabó un disco en formato de vinilo. La popularidad de esta agrupación fuera de Sevilla creció tanto que en 1958 actuó en Madrid en la representación del «Auto de la Pasión» de Lucas Fernández, y también realizó una grabación en Televisión Española. «La Escolanía -comenta Sánchez Gómez- contribuyó a crear una memoria emocional de la ciudad y además mantuvo durante 35 años contacto con el repertorio de la polifonía clásica y contemporánea, algo que no había realizado otra escolanía hispalense».

El éxito de esta coral se debe en su gran parte al gran tesón que demostró durante 35 años su director, Ángel Urcelay. Éste tenía un coro de voces graves, la Capilla Angélica, que llegó a cantar con la Escolanía Virgen de los Reyes, creándose la Capilla Isidoriana con la participación de ambas corales. Por otra parte, la Escolanía Virgen de los Reyes ha sido cantera de distintas personalidades de la vida musical sevillana, como el compositor Juan Antonio Pedrosa; Fernando Pérez Herrera, director del Conservatorio Manuel Castillo de Sevilla; Juan Cala o Miguel Vázquez Garfia. Estos dos últimos fueron los principales ayudantes de Ángel Urcelay, dándose la circunstancia que Vázquez Garfia sustituyó al propio Urcelay en alguna ocasión en la procesión de la Virgen de los Reyes por encontrarse éste de vacaciones.

Ángel Urcelay, un renovador en los Seises

Para la historia musical de Sevilla es importantísimo el año 1960, momento en el que Ángel Urcelay es nombrado maestro de capilla de la Catedral de Sevilla. El músico sustituyó en el cargo a Norberto Almandoz, pieza clave en la música sevillana de la primera mitad del siglo XX y crítico musical de ABC. Al asumir su nuevo cargo Urcelay se encargó de la preparación e instrucción de los Seises, pasando la Escolanía a tener un protagonismo en la vida musical de la Catedral. Hasta el año 1960 los Seises bailaban y cantaban en las celebraciones de la Catedral. Sin embargo, a partir de que Urcelay asumiera su dirección, éste creó un pequeño coro para reforzar las voces de los Seises. «Urcelay usó la Escolanía Virgen de los Reyes como cantera de los Seises, ya que antes se formaban en el colegio San Miguel, y el cambio sustancial fue que los Seises se dedicaron a partir de entonces a bailar y ya nunca volvieron a cantar».

Otro hito de la Escolanía Virgen de los Reyes fue su participación en «El Miserere» de Hilarión Eslava. Los niños hacían las voces de los tiples. Con la jubilación de Urcelay en 1979 y el cambio de la sociedad española, la Escolanía se vio abocada a su desaparición, pero durante 35 años fueron vitales en la vida musical sevillana.









Utilizamos cookies para realizar medición de la navegación de los usuarios. Si continuas navegando, consideramos que aceptas su uso.