Carlos Crivell impresiona en Valencina con un pregón cuyo hilo conductor "ataca" de principio a fin al corazón de los presentes
Arte Sacro. Valencina de la Concepción amanecía como el resto de Andalucía con un sol radiante que se proyectaba si cabe, con más fuerza en la fachada de la parroquia de Nuestra Señora de la Estrella. La banda de la Oliva de Salteras llegaba, y los devotos y fieles de los titulares de la hermandad de la Vera Cruz se acercaban a la sede canónica de la hermandad en un día señalado del año: El pregón de la Semana Santa. Este año había cierta expectación ante el pregonero. Un joven sevillano, pero con varios pregones ya en sus espaldas y con su nombre y apellidos que ya ha sonado en el Consejo de Hermandades y Cofradías de la capital: Carlos Crivell.
Así, tras la presentación del pregonero del pasado año, Juan Carlos Heras, se postraba ante el atril Carlos Crivell, eso sí tras sonar varias composiciones musicales interpretadas por la banda de la Oliva, entre las que se encontraban 'Procesión de Semana Santa en Sevilla', la elegida por el pregonero.
Durante poco más de una hora el pregonero utilizó como hilo conductor las vivencias de un abuelo con su nieto, desde los comienzos de una Cuaresma hasta la salida procesional, todo ello en el ambiente de dos cofrades de la Vera Cruz de Valencina de la Concepción. Con pinceladas sobre la historia de la hermandad, el pregonero fue adentrando a todos en la herencia que en su día el abuelo dejaría a su nieto. Una herencia clara, su amor por la cofradía de la Vera Cruz, y el amor a los titulares por encima de todo.
El pregón, tuvo momentos impresionantes, que fueron interrumpidos más de ocho veces, con un final pletórico y en el que el público presente despidió al pregonero con más de cinco minutos de aplausos.
Entre los asistentes se encontraba un emocionado delegado de Fiestas Mayores de Sevilla, Gregorio Serano, quien junto a la familia del pregonero no salían de su asombro al finalizar el pregón.
Junto al pregonero estuvieron presentes, el pregonero del pasado año, el director espiritual de la hermandad, el hermano mayor de la Vera Cruz, el alcalde de Valencina de la Concepción, los hermanos mayores del Rocío, del Cristo de Torrijos, y de la Confraternidad de las hermandades de la Vera Cruz.
El pregonero recibió un grato recuerdo al finalizar el acto y antes de convivir con todos una gran comida, en la que todos los presentes alabaron al pregonero y al pregón, definido como el de las tres"C": Claro, conciso y correcto.
Fotos: Arte Sacro.