Pepe Asián recibió el Olivo de Plata

Francisco Santiago. Pocos homenajes tienen tanto valor y son tan merecidos como el que el sábado 21 de febrero recibió nuestro “Cirineo de las Cofradías”, el “infinito” (como le llamaron en la Gala) Pepe Asián.

Han sido décadas de buen hacer, de tocar todos los palor y todos tocarlos bien. Diseñador, pintor, autodidacta, decorador, vestidor, calígrafo, y amigo.

La Redención ha logrado hacer algo que poco se hace en Sevilla, como es reconocer “en vida” la labor de los suyos, por lo cual, no sólo fue el homenaje de la Hermandad anfitriona y de todas las demás a las que pertenece Pepe, fue el reconocimiento de la Ciudad a una persona que, quizás, muchos desconocían hasta ahora, pero que siempre ha estado ahí, una labor callada y a la vez intensa, un mundo por descubrir que, esperamos dure muchas décadas más…

¡¡¡Felicidades Pepe!!!

Fotos: Francisco Santiago