15/07/2005- Partido de baloncesto español en Nueva York

Hace unos años unos amigos cofrades que venían de Madrid de visita a Sevilla (no diré a conocerla, porque no era la primera vez que lo hacían) se quedaban maravillados ante lo que veían. No era Semana Santa, ni siquiera Cuaresma. Todo lo que pude enseñarles era lo que día a día podemos ver, capillas, altares, las imágenes expuestas al culto. Casi todos ellos conocían de sobra a nuestras hermandades, sus titulares, los imagineros que las tallaron, y más detalles de su historia, pero el poder contemplarlo todo de forma tan directa, con un modesto “cicerone” que era mi persona, que poco podía explicarles más de lo que ya sabían, les llenaba de satisfacción. Uno de ellos me dijo una frase: “es que sois la NBA”.

La comparación me hizo gracia, no sólo porque yo soy también aficionado al baloncesto, y por ende, al de la liga profesional estadounidense, sino porque refleja la realidad. Perdónenme los lectores que son de fuera de Sevilla (que sé que son muchos), pero en Semana Santa, mi ciudad es la mejor del mundo. Fuera de ella hay magníficas hermandades, hermosas imágenes, artísticos enseres, pero ninguna reúne en calidad, cantidad y devoción a tantas corporaciones y titulares como Sevilla que, siguiendo el simil que hizo aquel cofrade madrileño, es la NBA de la Semana Santa.

Pues bien, a ningún dirigente de la NBA, o a ningún empresario de Nueva York, donde juega uno de los equipos más antiguos, el New York Nicks, se le ocurriría organizar un partido del Caja San Fernando y el C.B. Granada, por ejemplo, en el Madison Square Garden, el pabellón deportivo donde juega el equipo local, y que pasa por ser uno de los recintos deportivos más importantes del mundo. No me imagino yo los luminosos que anuncian acontecimientos deportivos de todo tipo, junto a otros (como musicales), con un rótulo en la 8ª Avenida, en su cruce con la calle 33 diciendo “Spanish Basketball, Caja San Fernando VS C.B. Granada”. Los empresarios del Garden saben positivamente que de los más de 20.000 asientos del recinto ni el diez por ciento se cubriría. Por supuesto que el Ayuntamiento de Nueva York no apoyaría tal evento deportivo, a nadie se le ocurriría.

Y ustedes a estas alturas, si es que me siguen leyendo (gracias, por cierto), se preguntarán qué tiene que ver todo esto con las cofradías sevillanas. Pues muy fácil, no contentos con tener 57 cofradías que van a la Catedral en Semana Santa, más en torno a otras 10 en vísperas (incluyendo agrupaciones parroquiales), añadiéndole a esto las más de 40 procesiones de gloria, más de 15 sacramentales, unidas a procesiones extraordinarias que cada año hay unas pocas, via crucis, rosarios de la aurora, cruces de mayo, traslados, etc., a una empresa, con el patrocinio y el beneplácito del Ayuntamiento no se le ocurre otra cosa que organizar una procesión de pasos de Málaga, Cartagena y Valladolid (según ABC), o de Málaga, Valladolid, Medina de Rioseco y Cuenca (según Diario de Sevilla) el próximo 4 de febrero, saliendo y regresando a la Catedral y pasando por la Campana y la carrera oficial.

La iniciativa, repito, proveniente de una empresa, que es la que organiza Munarco todos los años con el lógico interés del beneficio económico, no sólo es apoyada por el Ayuntamiento, que lo ve como una iniciativa beneficiosa para el turismo (lástima que no piense lo mismo y no apoye de igual forma a las procesiones de gloria, que me consta atrae cada vez a más gente de fuera), sino por nuestro propio Cardenal, que ve con buenos ojos cualquier oportunidad para presidir actos con (supuestamente) gran asistencia de personas en los que multitud de medios cubran la información, como son, en general, los que organizan las cofradías.

Eso de traer a los pasos en camiones, las imágenes titulares supongo que embaladas, me parece, sinceramente, una falta de respeto hacia las personas que les tienen devoción. No comprendo el interés que las hermandades que vayan a prestarse a este espectáculo tienen por pasar por la Campana y entrar en la Catedral como si fueran el Gran Poder y la Macarena, porque no lo son, ni lo serán. Ni comprendo tampoco que Fiestas Mayores apoye económicamente a una empresa que se sirve de los incautos cofrades de fuera de Sevilla (que las hermandades sevillanas cada vez le prestan menos enseres). Ni, por supuesto comprendo el apoyo de la Iglesia diocesana a tal evento, que no aparece enmarcado en ninguna efeméride eclesiástica o devocional, sino al X aniversario de una iniciativa empresarial. Tal vez sea la oportunidad que ahora pide nuestro Cardenal para que haya palcos gratis en la carrera oficial ¿por qué no sillas gratis en nuestra Catedral y horario continuado desde la primera a la última cofradía, Eminencia?

Como cofrade sevillano, me siento con un abonado de los Nicks que un día pasando por la 8ª Avenida ha visto un letrero en el Madison Square Garden anunciando “Spanish Basketball, Caja San Fernando VS C.B. Granada”, y créanme, que con el mayor respeto hacia las imágenes que procesionarán el 4 de febrero en Sevilla (precisamente por que no sé cuáles serán), me parece que ni hay motivo, ni es serio organizar lo que vamos a ver.
 

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Foto Cabecera: Archivo Serrano - © Arte Sacro 2004