Un año más, la Patrona de los Capataces y Costaleros procesionó por las calles del barrio de Triana

Arte Sacro. El mundo del costal y el martillo estaba de fiesta. En la Parroquia de la Señora Santa, procesionó en la tarde noche de ayer, Madre de Dios del Rosario Patrona de Capataces y Costaleros.

El cortejo salió a las 19:30 horas desde la Plaza de la Sacra Familia del Barrio de Triana. La Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de las Tres Caídas abría la procesión, tras ella la Cruz Parroquial escoltada con dos faroles, tramo de hermanos con cirios, Simpecado escoltado por dos faroles, representaciones de la hermandad de la Pastora de Triana, Rocío de Triana, Esperanza de Triana; estandarte corporativo de Madre de Dios del Rosario, presidencia, cuerpo de acólitos, paso procesional de la Santísima Virgen y la banda del Maestro Tejera que tradicionalmente pone sones a esta talla mariana.

Como bien es sabido, esta procesión tiene la peculiaridad de que el capataz es rotativo, es decir, es muy raro que dos años seguidos sea el mismo capataz quien comande el paso. Este año, el honor recayó en Rufino Madrigal Campos, capataz de los pasos de la Virgen del Socorro de la Hermandad del Amor y la Virgen de la Cabeza de la Hermandad de las Siete Palabras.

Fotos: Mariano Ruesga Osuna y Joaquín Corchero.