Sobre la dolorosa del altar de besapies del Señor de la Redención

Eduardo Fdez. López. Fiel a mi estilo y curiosidad por conocer y dar a conocer aquellas otras imágenes pasionistas que nos encontramos por los templos de nuestra ciudad quiero hacer mención hoy a la dolorosa de la Iglesia de Santiago.

Enorme fue mi alegría al entrar el pasado domingo en el templo para el besapies del Señor de la Redención y encontrarme con esta dolorosa, para mí, y creo que para muchos una de las mejores sino la mejor de cuantas hay en Sevilla de este estilo.

La verdad que no acostumbramos en Sevilla a ver que una Hermandad cuente para el montaje de sus altares de cultos con imágenes existentes en su templo y que pasan los 365 días del año sin mayores miradas que las de unos cuantos como yo que se encargan en investigar sobre ellas y que aunque sean de muy mala calidad siempre llamaran mi atención.

El último caso puede ser el de la Hermandad de la Estrella que recuperó para su altar de quinario la imagen de San Juan que formaba parte antiguamente del Calvario de esta parroquia junto al Crucificado del Socorro y la Virgen del Buen Aire.

Esta dolorosa en cuyo rostro observamos una gran fuerza dramática mide entre 120 y 125 centímetros, es de autor anónimo y fue realizada a mediados del siglo XVIII. Por su postura, arrodillada y con manos entrelazadas pudo haber formado parte en su día de un Stabat Mater, figurando a los pies de algún crucificado.

Otras dolorosas de este estilo que podemos ver en Sevilla son la Antigua y Siete Dolores de La Magdalena, la de la Escuela de Cristo o la que preside durante estos días de Cuaresma la parroquia de San Andrés a los pies del crucificado.

Fotos: Eduardo Fdez. López